Comparto Enlaces de material de trabajo, algunos no se pueden publicar por derechos de Autor (Ley 23 de 1982). Estaré pendiente de otro encuentro y copiamos documentos.
http://www.uees.edu.sv/editorial/publicaciones/Normas%20APA%20Sexta%20Edici%C3%B3n.pdf
http://www.uniagustiniana.edu.co/images/biblioteca/Normas-APA-2014.pdf
NORMAS
GENERALES SOBRE REDACCIÓN, CONTENIDO Y ORGANIZACIÓN DEL MANUSCRITO*
Expresión de ideas
Las unidades de
pensamiento, ya sean palabras, oraciones o párrafos, se deben ordenar. Debe
presentarse continuidad entre las palabras y los conceptos a través de un
adecuado desarrollo temático desde el inicio hasta la conclusión del documento.
Una forma de mantener la continuidad se logra mediante el uso de elementos de
transición o nexos, los cuales pueden ser: un pronombre que remite a un
sustantivo, una conjunción, una preposición o un adverbio temporal. También se
puede ayudar en el ritmo del documento con un manejo apropiado de los signos de
puntuación, particularmente si su uso contribuye como un apoyo para el
significado.
La prosa científica y
la creación literaria sirven a propósitos diferentes, por consiguiente se deben
eludir los artificios y tender a una comunicación clara y racional, debido a
que la cercanía con el material y el tiempo que se ha pasado redactándolo
pueden contribuir a que pierda su objetividad. Es conveniente pedir a un colega
su lectura para poder descubrir a tiempo las contradicciones e inconsistencias
que se puedan generar.
Es importante tener en
cuenta que se debe decir únicamente lo que debe ser dicho. Se deben eliminar
las redundancias, la palabreja, el uso excesivo de la voz pasiva, la jerga, las
observaciones irrelevantes, las elaboraciones de lo obvio o las descripciones
excesivamente detalladas de las herramientas, los participantes, los diseños,
entre otros apartados.
Estilo científico
Los escritos
científicos exigen una comunicación clara, de tal manera que al leer un
artículo científico sea evidente la diferencia en el estilo con el empleado en
la literatura convencional. Para facilitar la redacción puede emplearse una
serie de formas preescritas, si bien está permitido el uso de alternativas
siempre con el fin de esclarecer la comunicación. Algunas de estas formas son
las siguientes:
1. Las ideas deben
presentarse en forma ordenada y organizada, ya sea una palabra, una oración o
un párrafo. Para que los lectores comprendan, se debe mantener continuidad en
las palabras y los conceptos. La continuidad puede obtenerse de diversas
maneras: a) mediante un buen uso de la puntuación; o b) haciendo uso de
palabras o frases de transición. Estas palabras o frases ayudan a mantener el
flujo del pensamiento, especialmente cuando el material es complejo o
abstracto.
2. La comunicación debe
ser clara y racional, con un estilo sobrio y conciso. Algunas técnicas
literarias propias de la escritura poética, tales como la ambigüedad de la
expresión, la inclusión de lo inesperado, la omisión de lo esperado, el cambio
súbito de tópico o de tiempo en los verbos, las florituras, el colorido y las
metáforas pueden ser confusas o perturbadoras para los lectores de la prosa
científica. Debe escribirse únicamente lo que se necesita decir. Eliminar la
redundancia, el exceso de palabras y el uso de lenguaje coloquial. Evitar el
uso de adjetivos innecesarios, las elaboraciones de lo obvio, las observaciones
irrelevantes o colaterales. El uso de frases cortas y directas, usando palabras
sencillas y comunes es usualmente la mejor estrategia para facilitar una buena
comunicación.
3. El uso consistente
en el tiempo de los verbos ayuda a tener una expresión fluida. El uso del
pasado o del presente perfecto es apropiado para la revisión de literatura y la
descripción del procedimiento. Debe usarse en cambio el tiempo presente para
discutir los resultados y presentar las conclusiones.
4. El lenguaje debe ser
exacto. Cada palabra debe significar exactamente lo que se quiere decir. De
igual modo, deben evitarse las aproximaciones de cantidad como "la gran
mayoría" o "prácticamente todos" o "muy pocos". Este
tipo de expresiones da lugar a que distintos lectores interpreten de diferente
manera lo que se quiere decir.
5. Deben usarse los
pronombres apropiados para referirse a los sujetos de las acciones. Los
circunloquios, a nombre de una supuesta objetividad pueden llevar a
confusiones. Por ejemplo, escribir "el experimentador leyó las
instrucciones a los sujetos" cuando el experimentador es quien escribe el
documento es redundante. No debe usarse el plural "majestativo" (el
nosotros) para referirse a un investigador solamente.
6. Deben evitarse
interpretaciones inadecuadas, ser cuidadoso en los informes para interpretar el
comportamiento del participante/sujeto o hacer suposiciones infundadas acerca
de tal comportamiento.
La lectura constante de
artículos de investigación, además de mantener al lector actualizado, se
constituye en una práctica adecuada para familiarizarse con el estilo
científico y con las estrategias empleadas por los investigadores para lograr
una adecuada comunicación científica.
Los escritos deberían
ser leídos por otra persona para que pueda presentar sus apreciaciones desde
otra óptica y pueda señalar si realmente el escrito dice lo que se desea
comunicar. Si se dispone de tiempo y hay dificultades para que otra persona
evalúe el documento, se recomienda dejarlo por un tiempo y retomarlo después,
para leerlo más adelante con un sentido crítico y determinar la pertinencia y
consistencia por sí mismo.
Las normas APA hacen
énfasis en el compromiso de la ciencia de asegurar un trato justo a individuos
y grupos, y por tanto buscan evitar la perpetuación en la escritura de
construcciones que puedan implicar prejuicios contra la gente en virtud de su
género, orientación sexual, grupo étnico, discapacidad o edad. Así como se
aprende a revisar la propia escritura en cuanto a ortografía, gramática y
redacción, también se aprende a descubrir juicios de valor implícitos.
Cuando el trabajo se
refiera a una persona o varias, deben elegirse palabras concisas, claras y
libres de tendenciosidad. Si se presentan dudas se debe ser más específico. Por
ejemplo, al referirse a los seres humanos debe emplearse la expresión “hombres
y mujeres” en lugar de sólo “hombres”. Para describir en el texto grupos de
edad (como, por ejemplo, al reseñar estudios previos y al describir las
características de la muestra) se debe proporcionar rangos específicos de edad
en lugar de categorías generales.
Las diferencias en
estado civil, orientación sexual o el hecho de que una persona presente una
discapacidad, entre otras, no deben ser mencionadas injustificadamente; solo se
hará referencia a estos aspectos cuando sean pertinentes a la investigación y a
la comprensión de los objetivos de la misma. No se debe etiquetar a la gente.
No es adecuado clasificar a los participantes como si fuesen objetos o
equipararlos, por ejemplo, con su diagnóstico o discapacidad: los amnésicos,
los depresivos, los hiperactivos, entre otros (en vez de eso, se sugiere hacer
referencia a los participantes de una manera no rotulante, por ejemplo:
"...los niños con diagnóstico de déficit atencional...").
Debe reconocerse la
participación de los colaboradores en el estudio, escribir de manera tal que
los individuos resulten agentes de la acción y no receptores de la misma. No
emplear el término impersonal sujetos, en su lugar se pueden usar las
expresiones “participantes” o “personas”.
El autor es el
responsable primario de la calidad de la presentación de todos los aspectos del
documento: ortografía y puntuación correcta, citas precisas, referencias
completas y exactas, contenido pertinente, organización coherente, formato
apropiado y otros factores.
* Esta página fue
elaborada por el profesor César A. Rey A. (psicólogo, Ph. D.), con el fin de
facilitar la elaboración de reportes breves de investigación, artículos
científicos y proyectos de investigación (incluyendo proyectos de tesis grado y
de postgrado), de acuerdo con las normas internacionales de la Asociación Psicológica
Americana.